"El arte para mí es la mayor forma de expresión y comunicación que posee el hombre, con esa comunicación puede crear, expresar, transmitir, transgredir, causar efectos de adhesión o rechazo sobre los espectadores. Los sentimientos, emociones y sensibilidad son ingredientes imprescindibles para esta acción de transmitir lo que siente y percibe del mundo, de su entorno. La creatividad es también otro componente de la expresión artística autentica".
ENTREVISTA A: GRACIELA RODRIGUEZ
LUGAR: RÍO GALLEGOS, SANTA CRUZ
FECHA: JUNIO DE 2019
- Para comenzar a conocerte nos gustaría que nos comentes acerca de tus orígenes, tu lugar de nacimiento, si no naciste por aquí, comentános donde naciste, cómo fue que te trasladaste a vivir por estos lares y en qué año ocurrió.
Nací en marzo del ‘59 en la ciudad de Resistencia, Chaco. Soy la cuarta de cinco hermanos, mi padre, trabajador incansable, de quien aprendí la honestidad, el tesón y compromiso; mi madre modista, sus manos, hoy cansadas, me enseñaron del trabajo silencioso y creativo, hacia maravillas textiles. Ambos trabajaron a la par.
Resistencia es mi lugar de origen, es una ciudad muy soleada, cálida y de grandes espacios verdes y plazas, allí disfruté mi infancia en un barrio, que por aquellos años tenía calles de tierra. El sol de la siesta quemaba y era casi una obligación acostarnos, hacer la siesta era y es una costumbre arraigada en el Chaco (esto me revelaba casi siempre). Igual me acostaba e inventaba juegos o construía muñecas a las que vestía con trapos. En el mejor de los casos, me escapaba al patio para jugar bajo la sombra de un árbol y cerco mediante, con unas vecinas. El silencio de la siesta siempre quedó en mí como algo enigmático, con prohibiciones y miedos inculcados. La siesta era, según decían, el preciso momento en que salía a recorrer el lugar el Dueño del Sol, un personaje misterioso, pequeño, a quien había que tenerle miedo.
Así transcurrió mi primera infancia, luego vino el jardín de infantes y aquella primera vez que pinté en un atril de pintor, el único de la sala y del rincón de arte. Este era pequeño -quizás de mi altura teniendo en cuenta mis cinco años-. Momento sublime para mí. Aquel rincón no era muy solicitado por los demás niños y esto hacía que yo tuviera ese caballete disponible sólo para mí: pintaba todos los días y me gustaba mucho.
Recuerdo también las travesuras con los amigos del barrio, las calles soleadas donde sólo bastaba cruzar y encontrarme con los chicos y las chicas, eran días felices. Mi infancia y adolescencia fue plena y aún hoy tengo la suerte de encontrarme con aquellos amigos. La adolescencia transcurrió en los años ’70, de minifaldas, pantalones de botamangas anchas y altas plataformas de corcho que usé haciendo equilibrio. Época inolvidable.
Fueron años gloriosos de estudio y diversión compartida, por esos días hacía la escuela secundaria y en simultáneo cursé Bellas Artes, así el arte pasó a ser imprescindible para mí, como un alimento que me nutría y al mismo tiempo me abría un mundo desconocido y apasionante. Las disciplinas artísticas fueron un descubrimiento, el grabado, la escultura, finalmente el dibujo y la pintura fueron ejes rectores. Luego de aquella primera y lejana experiencia en el jardín, el interés por mi formación artística y el arte se fue profundizando, así fue que me decidí por la carrera y tomé clases hasta finalizar mis estudios en la Escuela Provincial de Bellas Artes N°1 de Resistencia, Chaco, donde me recibí de Maestra de Artes Visuales y Profesora en Pintura.
Más adelante me casé con Tato con quien formé mi familia, con quien me trasladé a Buenos Aires y luego de vivir allí unos años, nos mudamos a Río Gallegos en el año ’87.
Desde 1988 trabajé en la docencia como Profesora de Arte y simultáneamente comencé a producir y exponer; desarrollé también la gestión educativa. Fui Profesora titular en el Centro Polivalente de Arte (CPA), como en cargos directivos hasta abril de 2008, año en que pasé a la Coordinación General del Museo de Arte Eduardo Minnicelli (MAEM) dependiente del Consejo Pcial. de Educación, tarea que llevé adelante hasta el 2012 en que me jubilé.
- ¿Cuál es la motivación que te lleva a producir arte y desde cuándo comenzaste a sentir ese deseo o esa necesidad de expresarte a través del arte?
La motivación o el deseo que me lleva a producir arte es, justamente esa energía, ese fuego interno o deseo innato de hacer, de seguir haciendo, desde aquel primer atril del jardín, y por supuesto desde aquellos días adolescentes en que descubrí Bellas Artes y me apasioné por todas las formas de expresión que fui experimentando con el transcurrir del tiempo, haciendo que esas ganas de expresar crecieran hasta convertirse en un modo que ver, en un modo de sentir, en un combustible que me retroalimenta.
Es por eso que, con el tiempo, esa necesidad o motivación se convirtió en una forma de ver la vida a través del arte.
- ¿Podrías decir quién o quiénes son tus artistas referentes o más admirados?
En realidad, los artistas que admiré y que admiro son unos cuantos y van variando con el tiempo y de acuerdo a lo que me moviliza, son aquellos artistas creadores que han transformado la Historia del Arte como por ejemplo: Leonardo Da Vinci, Rembrandt, Picasso, Duchamp, Miró, Lucio Fontana, Marina Abramovic o artistas como Carlos Alonso entre otros contemporáneos que transforman con nuevas miradas los discursos estéticos, esos creadores/transgresores que rompen las reglas preestablecidas, marcando corrimientos o redefiniendo límites. Pero esa preferencia fluctúa o se incrementa de acuerdo a los corrimientos, o a los nuevos cambios de esos discursos en el Arte.
- ¿Cómo definís tu propia producción artística?
En las primeras imágenes tanto en el dibujo como en la pintura abordé una temática más social.
En la obra sobre el Cuerpo donde realizo impresiones sobre la tela, creo que, este rastro impreso y el registro fotográfico de la acción marcó un momento bisagra en mi obra, defino este trabajo como más personal, sin ser totalmente autobiográfico.
Esta producción ultima se fue construyendo a partir de la reflexión entre la historia heredada que me une al Chaco, el “Norte cálido” como origen y el desarraigo. Así como las experiencias cotidianas, el lugar donde vivo y la extrañeza del entorno elegido, el “Sur gélido” de la Patagonia y la inmensidad de su paisaje conforman el tema central de esta obra.
En la misma, busco reflejar el profundo cambio que fue vivir y experimentar otros entornos hasta llegar y habitar la inmensidad de Santa Cruz.
Como artista intento unir el camino entre “Mi Norte y Mi Sur” en una cartografía que acerque las distancias en ese acontecer de encuentros y despedidas, mostrando la propia huella en la huella colectiva, el rastro.
Por último, me interesa el medioambiente y los efectos de la polución en el planeta, por lo que hace unos años me expreso y realizo obras con material plástico de descarte, como concientización y reflexión social del planeta.
- ¿Considerás que tu producción manifiesta una identidad patagónica?
Sí, considero que mi obra posee una identidad patagónica, el largo camino recorrido en esta Provincia hace que siempre piense en el tema y que considere que mi territorio está donde yo me encuentro, de esta manera la Patagonia es parte de mi vida como también es el Chaco, mi lugar de origen, ambos están en mis trabajos.
- ¿Podrías contarnos cómo surgen tus obras y si crees que son el fruto de una inspiración?
Mi trabajo a lo largo de estos años se fue configurando con diferentes formas de decir, fui experimentando con variados materiales, las temáticas fueron marcando rumbos imprevistos y pasando por soportes bidimensionales y tridimensionales. El dibujo me condujo inexorablemente a otros lenguajes: busco, encuentro, transito sin certezas un mapa donde me permito experimentar e incursionar diferentes discursos estéticos.
Pienso que las obras surgen como fruto del trabajo, dedicación y la energía que pongamos en ella, no creo específicamente en una “inspiración” sí estoy convencida que es necesario tener una disciplina de trabajo con la cual el artista se expresa cuando necesita comunicar y eso es quizás una forma de inspiración que lleva a la transformación, tanto del artista como del espectador.
- ¿Qué materiales y recursos seleccionás para dar forma a tus obras?
A lo largo de mi carrera he trabajado con materiales y soportes diversos. Desde los inicios, en pintura he trabajado con distintos soportes usando colores al óleo o acrílicos, pasteles, etc. Luego se fueron configurando sobre diferentes soportes experimentales, como tela, en objetos e instalaciones.
En dibujo trabajé con papel, papel fotográfico o fotografía intervenida, lápiz, tinta, etc. Partiendo a veces desde la línea, otras desde la mancha e incorporando el color. En cuanto al soporte he incorporado también tela y el uso del acrílico con tinta china. Actualmente incorporé collage.
Actualmente para la obra del cuerpo trabajo con telas y pintura body Paint.
En los trabajos por el medio ambiente utilizo plástico reciclado en trabajos espaciales o instalaciones.
- ¿Qué lugar pensás que ocupan las Artes Plásticas en la provincia de Santa Cruz?
Pienso que las Artes Visuales en la Pcia de Santa Cruz ocupan un lugar destacado a nivel nacional e incluso internacional, los artistas provinciales se desenvuelven y exhiben sus obras en distintos puntos del país con excelente nivel, llevando no sólo sus obras, sino también nuestra cultura e identidad artística y única.
- Por último, podrías definir con tus propias palabras, ¿Qué es el arte?
El arte para mí es la mayor forma de expresión y comunicación que posee el hombre, con esa comunicación puede crear, expresar, transmitir, transgredir, causar efectos de adhesión o rechazo sobre los espectadores. Los sentimientos, emociones y sensibilidad son ingredientes imprescindibles para esta acción de transmitir lo que siente y percibe del mundo, de su entorno. La creatividad es también otro componente de la expresión artística autentica.
Producir obra en estas latitudes es una práctica solitaria, e intentar hacer arte es además una experiencia extrema que requiere una actitud de resistencia.
